QUIEREN “NUBLAR” EL CIELO, SE RIEN DEL
MEDIO AMBIENTE…, Y DEL CÁNCER
Con todo el cielo me da que no van a
poder, pero con cincuenta kilómetros cuadrados, aproximadamente, puede que sí;
si pudieran lo harían con tal de seguir con el “saqueo” de las arcas públicas. Fuerte,
pero no hay otra forma de decirlo. Y, aunque les parezca que me voy a referir
al cambio climático, no es así… en una pequeña parte, claro. Lo que servidor
trata de que sepan, para que estén alerta porque es grave, es como, con la
venia del Alcalde de Castuera (PSOE) y sus adláteres ediles y el asentimiento
de los concejales del PP, se va a llevar a cabo un proyecto de construcción de
una INCINERADORA en el término municipal. Al principio, presuntamente camuflada
como sólo para animales muertos, pero que luego, intuyo (¡ojalá yerre, por el
bien de todos!), será para eliminar residuos sólidos que es donde está el
verdadero negocio que, obviamente, proporcionará pingües beneficios sólo con,
la basura de los pueblos de la Mancomunidad. Olvidándose, como no, de una
Planta de Reciclaje en su lugar, aún sabiendo que contamina menos y da más
trabajo. Lógico, si se lleva a cabo el famoso “que hay de lo mío”, con la
INCINERADRA el 3% puede que alcance el 20%, o quién sabe si más aún. Y si no
hay tanto por ciento, pues a ver si “caen” un
par de pisitos para los niños, los pobres.
En principio la ubicación está
prevista al lado del Matadero, donde trabajan la hija del Alcalde y la de la
jefa de la oposición del PP; “ambas, por supuesto, habiendo cumplido con los
principios de IGUALDAD, MÉRITO Y CAPACIDAD”. Así pues, sino hay quien pare el
desafuero, ya que, para colmo, al
parecer, es una zona protegida donde se piensa hacer, desde ese lugar el humo
de las calderas “nublarán” toda la comarca de La Serena…, y quizás parte de la
Siberia y de otras Comarcas limítrofes. Y no sólo nos quedaremos sin nuestra
mejor fuente de energía y sin poder disfrutar de esos magníficos días soleados
de primavera, otoño y verano esenciales para nuestra agricultura y ganadería,
sino que, únicamente, para que se vayan haciendo a la idea, el índice de
posibilidades de padecer cáncer de diversas clases (más de pulmón) aumentará en
un 50% según los expertos en estos temas. De hecho, estos políticos (que son,
más que políticos, mercachifles y auténticos filibusteros) deberían explicarnos
porqué, al parecer, este tipo de INCINERADORA la han rechazado tanto en
Villanueva de la Serena (24.000 habitantes) como en Don Benito (36.000
habitantes).
Como primer aviso. Es una refrendada vergüenza:
Presuntamente, no sólo nos quieren “nublar” el cielo, sino que, además, nos
quieren “envenenar” para hacer negocio; y con el inri de que, verosímilmente,
esté altamente subvencionado con el dinero de los impuestos de todos los
extremeños. Veremos si no hay que tirarse a la calle para impedirlo, pues estos son algunos de los
efectos nocivos que tendremos que soportar
:
- Emisiones atmosféricas contaminantes
- Emisiones de efluentes líquidos producidos en el
sistema de purificación de gases (no contempladas por las metodologías de
cálculo utilizadas)
- Generación de residuos sólidos secundarios
(cenizas y escorias, que se clasifican entre peligrosas y no peligrosas)
- Ruido e impacto visual (asociado con la presencia
de chimeneas)
- Ocupación de territorio
- Movimiento de la tierra
- Desmantelamiento de la instalación en el final de
su vida útil
- Impacto visual (no sólo debido a la presencia de
chimeneas).
- Los contaminantes atmosféricos son los más
peligrosos, ya que conllevan una repercusión directa sobre la salud de las
personas y los ecosistemas.
También
presenta una serie de inconvenientes bastante importantes, como son:
· No elimina
totalmente los residuos, por lo que se necesita un vertedero especial para el
depósito de cenizas procedentes de la incineración, parte de las cuales son muy
tóxicas.
· Se generan gases
tóxicos que deben ser tratados, como las dioxinas, que son
compuestos cancerígenos.
· Necesitan un
aporte de energía exterior para su funcionamiento.
· Baja flexibilidad
para adaptarse a variaciones estacionales de la generación de residuos.
· La inversión
económica y los costes del tratamiento son elevados (250 millones de euros para
una planta de tratamiento de unas 450.000 t/año).[2]
· Posibilidad de
averías, por lo que se necesita un sistema alternativo de tratamiento.
· Anula la puesta
en marcha de políticas encaminadas a la reducción y reutilización de residuos,
por la necesidad de rentabilizar la inversión hecha.
Lo intentaron con una REFINERÍA y ahora
lo quieren intentar con una INCINERAADORA, pero esta es la tierra más sana del
País; donde se dice que nacen los Dioses, que no van a permitir que nublen el
cielo de cenizas.