Wikipedia

Resultados de la búsqueda

jueves, 24 de noviembre de 2016

23/11/2016.- EXIMIR DE LOS TRIBUTOS


EXIMIR DE LOS TRIBUTOS

 

En esta “Democracia” española -que no es tal, de eso no hay duda- plagada, como estamos viendo a diario, de políticos corruptos que, a su vez, como no puede ser de otro modo, hacen que también lo sean casi todos los mandamases de los grandes lobbies del país (los accionistas chitón mientras se repartan beneficios) y muchos empresarios de las PYMES  y Autónomos (éstos últimos, los menos), hay varios delitos con los que los medios de comunicación nos “alegran” el inicio de cada día. Salvo, claro está, que no ocurra un fallecimiento como el de la Sra. Barberá (q.e.p.d.) o algún otro personaje político importante y ocupe todas las portadas. Raro es que no aparezca cada mañana un nuevo caso de Prevaricación, Tráfico de Influencias, Infracciones Urbanísticas, etc. Hoy leo en E.P. (escrito de DS/Política) que en la CCAA presidida por la socialistas -lo de socialistas es un decir, como todos sabemos- Susana Díaz, o sea, Andalucía, la buena Sra. tiene en su “restaurante político” algo así como “un revuelto de la casa” con familiares, amigos y compañeros suyos y de altos cargos, amén de los correspondientes clientelistas, “mamando” de la teta de la Administración en la que han entrado por arte de birlibirloque. Familiares de D. Felipe González como Juan María González Mejías (un “trabajador fantasma”) o María Antonia Rodríguez Márquez  (que es coordinadora de Área en la agencia IDEA, la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía y que ocupó puestos de dirección tales como subdirectora de Recursos Humanos y Servicios Generales, jefa del departamento de IFA, directora de gabinete y técnica de Egmasa y técnica de Recursos Humanos en la Sociedad Estatal Expo’92.) forman, con el resto de “enchufados” (ver escrito en E.P.), un grupo muy nutrido de personas con un gran salario (no el de los trabajadores extremeños) y enormes privilegios junto a los incontables de las también incontables empresas públicas, fundaciones e Institutos que predominan en dicha CCAA a la que su Presidenta quiere poner como ejemplo de gestión para un futuro Gobierno del País. ¡Qué Dios nos coja confesados si llega ese momento! Servidor, seguro, pide asilo político aunque sea en Chipre.

¿Qué se puede hacer para evitar tanta podredumbre? Muy poco, por no decir nada. Lo dicho y el clientelismo intentarán meternos como sea el “sapo”. Y si no, al tiempo.

Pero, el gran fraude a la Democracia, a esta “Democracia”, no es sólo de los casos antes citados, que también. Para mí, el peor enemigo de una política sana está en la exención deliberada de los impuestos por parte, fundamentalmente, de los Alcaldes. La gente a la que no se le pide  que contribuyan como los demás, hacen buena la famosa frase de Groucho Marx sobre sus principios. Es decir, olvidan éstos, olvidan su ideología, a la hora de emitir su sufragio y votan, aunque sea un miserable, al candidato que les ha favorecido no exigiéndole este o aquel impuesto…, sobre todo, la famosa Contribución. Da igual ser de izquierdas, de derechas, del centro (¡vaya churro!), socialistas, comunistas o fascistas, la exención de impuestos, el perdón de los tributos, puede con todo. Más en estos tiempos de carencias generalizadas.

Y, por supuesto que con la Prevaricación, el Tráfico de Influencias, las Infracciones Urbanísticas, etc., se consiguen muchos votos (y fondos para las campañas electorales), pero no los suficientes para lograr casi siempre MAYORÍA ABSOLUTA. Sólo hay que darse una vuelta por la mayor parte de las poblaciones y veremos cómo sus Alcaldes han pasado más de 20 años en la poltrona municipal por regla general. Eso sólo se consigue con los “perdones”, no cabe la menor duda. Hay quien asegura que cada “perdón” supone una media de ¡nueve votos!

Si se pudiera echar la cuenta -o se quisiera- de todos los Pueblos y Ciudades de España, este fraude encubierto para poner a su favor los resultados electorales del que nadie habla, pero que está ahí vivito y coleando, supondría para el Erario tanto o más dinero que el que se recaudaría corrigiendo el conocido fraude fiscal o la economía sumergida. Sin que, obviamente, haya que olvidar dichos fraudes. Y, por supuesto, los resultados electorales serían muy distintos a los que son ahora: ¡se acabarían las mayorías absolutas!

Para acabar. Como no me gusta hablar por hablar, les diré que en este pueblo en el que vivo, CASTUERA, en los últimos ¿diez, quince años, quizás?, para el caso igual da, se han perdido, hemos perdido los ciudadanos, la friolera de cerca de ¡dos millones de euros! que se han “perdonado” en su mayoría a gente que bien podía pagar; entre ellos está, lo repito una vez más, la Contribución de la casa donde vive el Alcalde (sin pagar desde el 2007 al 2012, que se sepa) y una plusvalía de más de 3.000 € que los populares encontraron en un cajón del Ayuntamiento suya o de una familiar que, no sabemos por qué, ha prescrito sin cobrarse. Y en los próximos años, al parecer, van a quitarse de los apuntes contables del Ayuntamiento otros ¡dos o tres millones de euros! que, obviamente, no se han podido cobrar…, o, pudiera ser, no se han querido cobrar.

23/11/16 

09/11/2016.- LAS "RUFIANERÍAS" TIENEN LA CULPA


LAS “RUFIANERÍAS” TIENEN LA CULPA

 

El hecho de emplear el término “rufianerías”, que quede claro, no significa que me vaya a referir a las disertaciones del Diputado de ERC en el Congreso Gabriel Rufián Romero. En Absoluto, independientemente de que, personalmente, sus “pláticas” no me perecen ofensivas (¿desde cuándo se ofende al decir la verdad?), ya que, hay quienes ofenden más sin apenas abrir la boca. Con sólo decir “abstención” se ha ofendido a todo un grupo de gente (no militantes en exclusiva) que confió en lo que una y mil veces se les había prometido. Con esa sola palabra pronunciada por intereses personales y quizás espurios se ha ofendido a más de cinco millones de españoles que habían dado su representatividad a unos individuos que no comulgaban con el liberalismo según se explicaban, pero que, por desgracia, no era cierto. Una vergüenza más de los sinvergüenzas paracaidistas incrustados en un partido que se suponía de izquierda pero que ha resultado ser un partido de cuatro malandrines al servicio del gran capital y de los poderes ocultos que manejan los designios de la mayoría, los pobres designios, para vivir como nadie sin darle palo al agua y sin tener que presentarse a ningunas elecciones. Por supuesto, con la desvergüenza añadida de los Diputados extremeños (“tocinete” Sánchez Amor y compañía) que nunca piensan en que su región es la más pobre del país y la más abandonada desde el principio de los tiempos por los gobernantes de la nación. Claro que a ellos les va de maravillas con este sistema: sueldos (escandalosos con respecto a lo que percibe cualquier trabajador en esta miserable tierra explotada por cuatro caciques y cuatro terratenientes sin escrúpulos de ninguna clase) y cargos para todos los de casa y amigorros sumisos que se presten. En definitiva: humillante.

Y qué poco gusta a todos éstos trapalones de la recancamusa que alguien les diga las “verdades del barquero”, aunque sólo lo haga en parte y con gesto tan serio como lo hace Gabriel Rufián romero. Lástima que no estén en el Parlamento inglés (independientemente de que sería imposible, porque los ingleses no son tan borregos como los son una gran cantidad de extremeños que votan a estos vilordos que no han hecho nunca nada), no aguantarían ni un solo asalto, porque allí es normal que se digan las cosas claras y nadie sale corriendo escandalizado en busca del primer juez que encuentre (de los suyos, claro) para poner una denuncia. Se debate y se agarra de la pechera si es necesario y se demuestran las agallas y nadie huye.

En fin, escribo “rufianerías” pensando en lo ocurrido en USA. La victoria de Donald Trump, en mi modesta opinión, es producto de las “rufianerías” que asolan el mundo (de eso sabemos más que nadie los extremeños porque las vivimos a diario con este atajo de rufianes que nos gobiernan). Es la victoria del liberalismo más descarado producto del fracaso por la corrupción de la socialdemocracia que, sabido es, está llena de rufianes que no tienen ese apellido. Es la victoria de eso que han dado en llamar populismo (en este caso de derechas), pero no se trata de populismos sino del derrumbe de un sistema que se ha auto-dinamitado precisamente por acoger en sus filas a todo tipo de “populistas” ávidos de vivir a costa de los impuestos de los demás. Lo que, sin más remedio, ha dado lugar a que lo que estaba creado para mejorar las relaciones, los servicios sociales, la disminución de las desigualdades de todo tipo, la educación y la sanidad universal, etc., etc., ha saltado por los aires producto de esas “rufianerías” de los gobernantes (mirar los países nórdicos, ejemplos de socialdemocracia, donde comienza a notarse ya cierto deterioro) que, demagógicamente, se han valido de todas las trefes para llevar a cabo, al modo de cualquier truchimán, sus mil y una añagaza mediante  salarios estrambóticos y prebendas sin límite. A la socialdemocracia, que bien aplicada es el mejor sistema para evitar desigualdades, sólo queda cantarle un treno. Los populismos, que no lo son tanto en ocasiones, ya que se les atribuye el término a gente que quiere estar con la gente y no con los descerebrados y salteadores de caminos, tienen la palabra: el ciclo actual de la gobernabilidad del planeta. El exceso de establishment ha traído estas consecuencias en la poderosa nación…, que, dicho sea de paso, van a ser profundamente negras para una parte muy mayoritaria de la población mundial. Los gringos no perdonan, y sino al tiempo. No obstante, no podemos darnos por vencidos sin luchar. Si el PSOE y el PP (los de Ciudadanos pintan menos que un pastel en la puerta de un colegio) se meten el rabo entre las patas, todos sabemos por qué…, pero los demás seguiremos aquí, porque “no hay mal que cien años dure ni cuerpo que lo aguante”.

09/11/16

martes, 8 de noviembre de 2016

EL CLIENTELISMO "SE TRAGA" LOS PRINCIPIOS 25/05/2015


EL CLIENTELISMO “SE TRAGA” LOS PRINCIPIOS

 

Estamos ante una nueva cita electoral, y con la irrupción de unos cuantos Partidos Políticos de nueva creación o que han ampliado su ámbito de actuación, parece que va a haber unos alicientes añadidos a los que ya proporcionan (aunque un poquito decaídos) los Partidos de siempre, prácticamente, desde el inicio de la “Dedocracia”. Cerca de 40 años de tiempo, al que cada cual puede llamar como quiera: hasta Democracia si alguno lo desea. ¡Allá él!

No hay duda de que los que acaban de llegar, han puesto en mucha gente una nueva ilusión que ya tenía olvidada dado el sentir tan similar de los representantes de los Grupos tradicionales que sólo se han preocupado de “solucionar” sus situaciones propias y las de sus “amigos” y familiares… ¡y algunos, de que manera! Pero eso no significa que todo vaya a cambiar así como así porque aparezcan “nuevas” estrategias. En 40 años, da tiempo de sobra para convertir un País, por muy País que sea, en una Nación dominada por el clientelismo de norte a sur y de este a oeste. Y el clientelismo, discúlpenme, “se traga” los principios…, y más en la situación de paro y de pobreza que se encuentran tantas personas.   

Un articulista y escritor de lo mejor que tenemos en España decía en uno de sus artículos a finales del pasado mes de marzo: “existe una infección cerebral, que se llama ideología mórbida, mucho más contagiosa que la gripe del pollo o la enfermedad de las vacas locas contra la que no existen vacunas… Aunque los medios de información descubran y aireen cada día sus delitos de cohecho, malversación de caudales públicos y robos descarados piensas que sus tropelías no te atañen. Los votas, pero tú eres un ciudadano honorable. Por mucho que los veas entrar y salir de los Juzgados y de las cárceles, esa fiebre ideológica te obliga a creer que basta con el cabreo para sentirse a salvo del contagio… La virulencia de esta infección cerebral te llevará a las urnas una vez más como un borrego…”  

Por eso, “si de forma consciente votas a un político corrupto es porque tú en su caso harías exactamente lo mismo”. Y harías exactamente lo mismo porque eres una de tantas víctimas del clientelismo dominador. La libertad que da tener un puesto de trabajo sin que te lo haya proporcionado nadie está muy cara y es muy escasa. Por eso, el clientelismo, que reitero, “se traga” los principios, se lo va a poner difícil, muy difícil, a todos los Partidos que acaban de llegar; y lo peor de todo es que muchos miles de españoles tendrán que resignarse y seguir padeciendo las consecuencias del Poder Financiero y los Judas (la mayoría de políticos) que se seguirán vendiendo al Gran Capital. ¡Triste futuro!... muy triste.

OCURRIÓ EN CASTUERA: ¿ES UN "ATROPELLO"? 27/11/2015


OCURRIÓ EN CASTUERA: ¿ES UN “ATROPELLO”?

 

Pues igual no, tal como está la Justicia en España, pero… Un policía municipal (Emilio Morillo Crespo) trata por la fuerza de entregar a mi hijo una notificación del Ayuntamiento que está fuera de plazo -con lo que eso supone- e intenta agredirle dentro de mi vivienda cuando el chico se niega a recogerla al no ser para él. El policía municipal que acompaña a Emilio (Benjamín Fernández Sánchez), a petición de éste, llama al jefe de la policía municipal (vivimos en el nº 6 de la calle y la policía tiene su cuartelillo en el nº 2 de la misma) que separa el intento de agresión del valiente Emilio, pero ambos exigen, de forma insultante y amenazante, que mi hijo les proporcione el DNI para anotarlo en la notificación que no es suya y, por tanto, no está obligado a recoger. Lógicamente, se niega a dárselo. Los policías municipales (Emilio Morillo Crespo y el Jefe Santiago Cáceres Godoy), dentro de mi vivienda sin autorización y sin ninguna orden judicial que se lo permita (que denunciaré en su momento), hacen todo tipo de amenazas a mi hijo y lo denuncian por su negación a identificarse y a recoger la notificación, a pesar de, obviamente, ser sobradamente conocido y no ser obligatoria su identificación ni, por supuesto, tener obligación de recoger nada. Sin otra alternativa, mi hijo denuncia judicialmente a los dos policías reseñados por intento de agresión y amenazas de persecución policial. Amenazas que, viniendo de dos personas que van armadas habitualmente y que saben que con la “ley mordaza” prevalecerá su palabra, infunden en cualquiera el lógico temor de que éstas pasen a mayores y luego ya sólo haya el remedio que prefiero no pensar.

Se celebra el juicio el pasado día 24 presidido por la Juez Titular -supongo- del Juzgado nº 2 en el que, increíblemente, se dan las siguientes circunstancias y de ahí que me refiera en el título a un “atropello”: 1º) el Juzgado no le notifica al policía acompañante, que está incluido en la denuncia como testigo, la fecha del juicio hasta unas horas antes de celebrarse (fuera de plazo, ¿o no?); 2º) el denunciante es asimismo notificado sólo unos días antes del juicio y porque servidor -su padre- se lo requiere personalmente al Juzgado al filtrar los policías denunciados el día y la hora del mismo (es decir, ¿no pensaban avisarlo?); 3º) ya durante el juicio, el denunciante es interrogado por la Juez en no sé cuantas ocasiones, buscando, se supone, que éste cometa algún renuncio, ello teniendo delante la denuncia donde está especificado todo al detalle; 4º) tanto la Fiscal como el Abogado de los denunciados interrogan, autorizados por la Juez, sin límite al denunciante; y 5º) al denunciante, que lo solicita reiteradamente, se le niega incluso preguntar al testigo que el mismo lleva (que entra en la Sala tras solicitarlo el denunciante, pues todos los demás presentes se habían olvidado de él (¿intencionadamente?). Y la Juez, tras la exposición de las conclusiones de la Fiscal y del Letrado de los denunciados (que han permanecido durante todo el juicio uniformados y armados), que servidor, presente en la Sala, no aplaudió por respeto, ya que, ambas parecieron sacadas del Club de la Comedia, dio por finalizada la vista sin más ni más y, nuevamente, sin permitir abrir la boca al denunciante que, se supone, podría haber expuesto también sus conclusiones. Es lo mínimo que se puede pedir en un juicio, digo yo. 

Para entendernos: es como si a quien denuncia algo que es importante porque se han vulnerado sus derechos más elementales se le pusiera un esparadrapo en la boca para que no pueda decir nada y dar así la razón a unos policías municipales, posiblemente, “comprados” que para quedar bien con “su señor”, ¿con el visto bueno de la Justicia?, atropellan a cualquiera. Importante añadir que el resto de policías municipales de Castuera no comparten la actuación de sus compañeros y que, me consta, no se venden a ningún “señor” aunque éste les proporcione un ascenso sin corresponderle como ha hecho con el policía denunciado, Emilio Morillo Crespo, recientemente.