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martes, 16 de agosto de 2022

UN MONUMENTO EN CASTUERA

 UN MONUMENTO EN CASTUERA

 Cuando iniciaba mi “paseo matinal” para mantener mis constantes vitales sin sobresaltos y ayudar al Liposit a controlar mi colesterol, sobre las 7,45 horas aproximadamente (hay que madrugar debido al calor sofocante de después),  me encontré tirado en la calle un panfleto del Ayuntamiento que, lógicamente, llamó mi atención. Se trataba de hacer saber a la población que se iba a inaugurar un Monumento en Castuera a los colectivos que han luchado contra el Covid-19 haciendo un gran esfuerzo en sus labores cotidianas, es decir, cumpliendo -como vulgarmente se dice- a “raja tabla” con sus obligaciones laborales, lo cual no deja de ser digno de aplaudir cosa que ya hicimos la mayoría de los habitantes de Castuera en su momento para reconocer sus enormes sacrificios en la lucha contra el maldito Covid-19.

No tengo nada en contra, ¡Dios me valga!, de ninguno de esos colectivos a los que se dedica este Monumento, ni mucho menos, en contra de que se les premie como lo hace el Ayuntamiento. Pero, me surgen dudas en cuanto que a alguien o a algún colectivo se les dignifique demasiado en el cumplimiento de sus obligaciones, pues para eso se les paga y, sencillamente, ese es su deber con la ciudadanía cuando las cosas vienen “mal dadas”. ¿De qué nos sirve una Policía Municipal o una Guardia Civil cruzada de brazos todo el día? De nada, obviamente.

Los ciudadanos (masculino genérico, yo no me presento a ningunas elecciones) queremos una Policía eficiente y una Guardia Civil igual, que, por cierto, ahora si podemos presumir de tener en Castuera a pesar de su corto número de efectivos en ambos casos, lo que da lugar -como siempre ocurre en esta plutocracia desde hace más de 40 años- a que no es lo suficientemente amplia como para cubrir todas las horas del día. Y, curiosamente, Castuera duerme sin que haya ningún tipo de vigilancia durante las horas de la noche. Dicho más claramente (se me ha dado el caso), es difícil ser socorrido durante la noche, y en mi caso gracias a la gestión de la Guardia Civil, que estuvo presta cuando me dirigí a ella, se solucionó el problema que, por otra parte, no era nada de suma gravedad, pues un individuo de manera inconsciente había tapado mi puerta con su vehículo y como vivimos dos personas “mayores” creímos necesario que el acceso quedara libre por si había que utilizarlo en un caso de necesidad. No era -en esta ocasión- nadie de ese “garito” auspiciado por el PSOE local al que, presuntamente, entre todos los ciudadanos pagamos los servicios de luz y agua y del que hay indicios de carecer de la oportuna licencia municipal de apertura sin que ello preocupe a nadie de los que tienen la responsabilidad de exigírsela. ¡Viva Castuera!... para algunos, claro.

Pero, el problema es que, al no haber ninguna vigilancia “cercana”, Castuera se va convertir en un “paraíso para ladrones y delincuentes”, y no se explica, cómo un Ayuntamiento que tiene una ingente cantidad de empleados (quizás el pueblo con menos habitantes que más empleados tiene entre todos los de la provincia) no es capaz de contratar los policías necesarios para que se pueda hace el turno de noche. En fin… ¿Será quizás que el mayor “ladrón” del pueblo desempeña sus funciones de día en el Ayuntamiento y no hace falta vigilarle por la noche? Mi madre, que era una mujer muy intuitiva, decía que los ladrones de casa eran los más difícil de guardar. Tenía mucha razón, sin lugar a dudas, pues miren la política española en general y se convencerán sin que haya que darles demasiadas explicaciones.

Servidor no va a estar en esa inauguración porque no participa en ningún acto que organiza el Ayuntamiento mientras esté dirigido por ese “Sr” que, en mi opinión, debería estar cumpliendo condena en la trena de Badajoz o de donde hubiere elegido (ahora hasta se puede elegir cárcel, al parecer) por unos cuantos delitos que ya todo Castuera conoce sobradamente, además de que no le gustan los sitios donde se pasa lista. No obstante, vaya por delante mi total reconocimiento y gratitud para todos esos colectivos a que hace mención el Monumento y para el Monumento en sí, suponiendo que esté dedicado no sólo a los colectivos de Castuera; y, por descontado, muy especialmente al colectivo sanitario, al cual dedico el siguiente párrafo.

Pero, como todas las cosas tienen “un algo” que las hace en casos excepcionales para bien o para mal, y sin ánimo de ser agorero, creo que nadie debería olvidar que cuando se inició la pandemia, este PAÍS, que está entre los más desarrollados del mundo, y donde unos ¡500.000! políticos viven sin dar palo al agua en su mayoría, con sueldos estratosféricos para sus pocos conocimientos cuando no para su analfabetismo funcional, se encontraba con los centros hospitalarios carentes de todo lo necesario para hacer frente a una pandemia y muchos sanitarios pagaron con su vida esas carencias propias de un país subdesarrollado. La política, una vez más, había dado muestra de su ineptitud y de su apañamiento sin límite, dejando la Sanidad pública en paños menores cuando poco tiempo antes era una de las mejores del mundo. De haber estado mínimamente equipados se habrían evitado miles de muertes, y algo que resulta estremecedor es que el virus se ha cebado con la gente menos pudiente, o es que ¿quizás esa gente ha sido la que ha padecido con más virulencia la carencia de medios? Y no hablemos ya de los mayores de las Residencias de ancianos, que han caído como chinches (con perdón por la expresión) en las que, tanto públicas como privadas, se ha podido comprobar el deprimente estado en que se encontraban, sirviendo como ejemplo esa de Cáceres que ahora no recuerdo el nombre y las muchas del “mafioso” presidente del Real Madrid y de los franceses en la capital del país, sin que, por cierto, haya pagado nadie nada por las múltiples negligencias dadas y las muertes que bien podrían haberse evitado. Según un Sr. llamado Paulino Campos, fundador y portavoz de la Plataforma Estatal de Organizaciones de Familiares y Usuarias de Residencias para Personas Mayores y para Personas con Discapacidad, la mayor organización de este sector en Europa, hay Barrios de Kuala Lumpur, la capital de Malasia, mejores que las Residencias de la Comunidad de Madrid.

Termino, recomendando que escuchen en el Diario-16 el repaso que hace una Sra. llamada Beatriz Talegón del día 27/07/2022 si quieren saber algo más del famoso Covid-19 que, pudiera ser que no sea un virus que ha mutado de un animal sino sacado de un laboratorio, como ya hiciera saber en su viñeta de cuando empezó la pandemia El Roto al dibujar a un científico intentando coger una bacteria que se le escapaba. Y, que nadie olvide que hay estudios que demuestran que ahora se contagian más los vacunados que los no vacunados, amén de que las mujeres tienen cantidad de problemas que antes no tenían, no sólo en la menstruación. ¡Menudo gol nos han metido los gringos con esas vacunas que al final va resultar que son incluso contraproducentes para llenarse los bolsillos!

Dicho lo dicho, Monumento sí, reconocimiento también, pero Alcalde preparando ya las próximas elecciones municipales con sus panfletos sin que se sepa siquiera si para esas fechas no estará durmiendo entre rejas, NO.           

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