UN MILLONARIO Y UN GOBIERNO AUTÓNOMO "EJEMPLARES"

UN MILLONARIO Y UN GOBIERNO AUTÓNOMO “EJEMPLARES”

 

Hace unos días apareció en la prensa de papel una relación de los más millonarios del país en la que estaban algunos extremeños. Particularmente no me sorprende que haya tanta “gente” con tanto dinero. Es lo lógico que ocurra donde también hay muchísimas gentes -y cada día más- con muy poco, y un número bastante considerable con casi ninguno. Es, aunque no debiera, algo así como una regla general: para que unos pocos se atiborren de dinero, y puedan disfrutar de todos los caprichos materiales que existen en este miserable mundo dominado por oligarquías sin escrúpulos, tiene, “irremediablemente”, que haber una ilimitada cuantía de pobres y, si es posible, mejor de pobres de solemnidad para facilitar la servidumbre (el conocido principio fascista: “que muy pocos tengan demasiado y demasiados tengan demasiado poco”).

Hay por ahí quien dice que es cierto ese dicho tan conocido de que “los pobres los son porque no tienen voluntad de dejar de serlo”. Pero no, cuando la pobreza se radicaliza, como es el caso de España, no es cuestión de voluntades, ni de idiosincrasia, ni siquiera de la avaricia y la codicia de unos pocos privilegiados que han tenido la “suerte” de acceder cómodamente a posiciones dominantes o de “mando en plaza” y, por tanto, de poder convertir la sinecura en su mejor aliado para mantenerse “vivo” por mucho tiempo. No, en Absoluto, es asunto de INSTAURACIÓN de un modelo de Estado propicio a una interesada corrupción política y empresarial muy metódicamente planeada para que de los resultados apetecidos a esas oligarquías. Resumiendo: una autentica vergüenza de SISTEMA INSTITUCIONAL creado para poder DELINQUIR sin que sea delito hacerlo desde ciertos ESTAMENTOS PÚBLICOS. Un SISTEMA que comenzó con dos leyes fundamentales aprobadas en 1985: la Ley de Cajas de Ahorro, ¿para poder delinquir?, y cuyos resultados han dado lugar al mayor expolio político conocido; y la Ley del Poder Judicial, ¿para que la Justicia lo tenga difícil “manejándola”?, como se hace patente en el párrafo que sigue.

Lo remacho una vez más antes de pasar a lo referente directo al título de este escrito: siempre he defendido la teoría de que los males de la política española, los muchos males, especialmente la corrupción, son consecuencia de la Ley Electoral y de sus listas cerradas; y del Estado de las Autonomías y el control político de la cúspide de la Justicia (el Tribunal Constitucional y el Consejo General del Poder Judicial) junto con la colonización de ámbitos que no le son propios como el Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores, lo que ha dado lugar a la creación de una clase política profesional que como tal está predispuesta siempre a la captura de rentas mediante la generación de nóminas y dietas, y así, en ausencia de procedimientos establecidos para seleccionar plantillas, los políticos colocan en las nuevas Administraciones y Organismos a allegados, familiares, nepotes y camaradas creando una estructura clientelar y politizada asegurándose un sistema de captura de rentas, es decir, un sistema que no crea riqueza nueva, sino que se apodera de la ya creada por otros y por cuyas alcantarillas circula la financiación de los partidos. En fin…, demasiadas gente en paro y con las prestaciones agotadas, muchos niños sin recibir la alimentación imprescindible para su normal desarrollo, y casi el total de los jóvenes sin trabajo y sin ningún porvenir viviendo de lo ahorrado por sus padres o el miserable sueldo de éstos e incluso de la paupérrima pensión de los abuelos; y, mientras tanto, políticos y grandes empresarios (como este Sr. Gallardo del que ahora hablaremos) de “fiesta en fiesta”, de “viaje en viaje” y aprobando los pocos privilegios que les quedan por institucionalizar. ¡Bochornoso! Si en vez de una Juez Alaya hubiera ciento siete como ella, este país sería otro, pero…, lo dicho: sólo hay una.

Cuando llegó D. Felipe González (un salva-patrias más) dijo que iba a poner a España de manera que no la conocería ni la madre que la parió. Cierto, los primeros años de su mandato el cambio se hizo patente en pueblos y ciudades, pero cometió un grave error en su ansia por llegar lo antes posible al poder: en su partido los “arrecogieron” a todos y se llenó de oportunistas y rufianes, gente de mal vivir que después de casi 40 años, la mayoría gobernados por ellos, no hace falta explicar a nadie como la han dejado. Y esta es ya la segunda vez que la desvalijan y que tendremos que levantarla trabajando -los que puedan- de sol a sol, unos en el pueblo y otros en “Getafe”, “Tarrasa”, “Ocharcoaga”, etc., o en Alemania o Suiza. Toda  esta engañosa Democracia sólo ha servido para que individuos como Alfonso Gallardo, que empezó recorriendo el sur de Badajoz con una furgoneta comprando chatarra y pieles, dos o tres décadas después posea el grupo industrial más poderoso de la CCAA, esté en posesión de la medalla de Extremadura, un sinfín de premios y hasta una cátedra en la Universidad de Extremadura con su nombre; conseguido todo, posiblemente, gracias a su sobrino directo y único heredero Francisco Fuentes Gallardo, mano derecha de Rodríguez Ibarra (ya me entienden) durante todo su mandato en la Comunidad Autónoma de Extremadura. Y claro, en el hecho de que esté entre los más ricos del país (450 millones de € de fortuna que se sepa, pues si tiene algunas “perrillas” más en Liechtenstein…) tiene mucho que decir la Junta de Extremadura (lógicamente, meritos aparte). Y si no, una vez más, vean sólo algunos datos de lo que dice ese famoso informe titulado “Alfonso Gallardo: algo huele a podrido en Extremadura”: en 1992 Gallardo recibió gratis los terrenos que la Junta había expropiado previamente para construir Siderúrgica Balboa; la operación fue llevada al Tribunal Supremo que dio la razón a los antiguos propietarios. En 1998 recibió gratuitamente en concepto de “cesión” del Ayuntamiento de Villafranca y de la Junta, la fundición de Transidesa a cambio de mantener la plantilla; el mismo año redujo la plantilla en 28 trabajadores a los que prejubiló. En el 2004 adquirió definitivamente la planta de fundición de Villafranca, al Ayuntamiento y a la Junta, por cincuenta millones de pesetas; dos meses después vendió el horno a Argentina por setenta millones de pesetas y dos años después desmanteló la planta sin conservar ninguno de los puestos de trabajo a que se había comprometido. En 1999 compró a la Junta de Extremadura la concesión de explotación de calizas en sierra de Alconera -expropiada por la Junta meses antes- por diecisiete millones de pesetas; el valor real de dicha concesión, según la propia Junta, podría rondar entre los cinco mil y nueve mil millones de pesetas. Ese mismo año de 1999 la Junta creó la empresa Gestión y Estudio de Recursos Mineros, dedicada exclusivamente a realizar los estudios para la cementera de Alconera, estudios que en cualquier caso normal, correrían a cargo del empresario. La Junta adjudica la Televisión autonómica a una empresa (PETSA) creada por Gallardo (20%) y al grupo Prisa (51%); el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura consideró ilegal la adjudicación por eludir el control público. Recibió una subvención de 920.000 € de la Junta para construir la fábrica de tubos Europa en Jerez; dos años después vendió la maquinaria de la fábrica -que no había llegado nunca a funcionar- a Irán. En el 2002 recibió una subvención de la Junta para crear 140 puestos de trabajo en la empresa Suministros AG; la empresa era un local vacio de 15 metros cuadrados y los 140 puestos de trabajo creados eran de trabajadores de Siderúrgica Balboa. En el año 2000, tras una comida con Rodríguez Ibarra, Francisco Fuentes y Ricardo Leal en un cortijo de este último, Gallardo se presenta -al día siguiente de la comida y un día antes  de que finalice el plazo- a la adjudicación del suministro de gas en Extremadura; la Junta adjudica a Gallardo dicha concesión aduciendo que es la “única empresa con suficiente solvencia técnica”. En 1999 (¡que añito, madre mía) recibió el 74% de las subvenciones que Sofiex destinó a todas las empresas extremeñas. En el 2003 recibió el 40% del presupuesto del Plan de Electrificación Rural de la Junta de Extremadura; en el 2004 recibió el 85%; en el 2005 recibió el 100%. En el Año 2004 recibió el 73% de todas las ayudas de la Junta de Extremadura a las PYMES. Y para acabar: las dos principales empresas del grupo Alfonso Gallardo (A.G. Siderúrgica Balboa, S.A. y Alfonso Gallardo S.A.) están participadas en un 70% por la empresa MARLMROS, domiciliada en Ámsterdam; el gerente y único accionista de esta empresa es Alfonso Gallardo.

¿Qué quieren que les diga? Un millonario y un gobierno autónomo ejemplares…, o como dijo en una ocasión Forges: “endi luego que los hay con suerte”.

¡Malditos filibusteros de todas las calañas! ¿A quién le puede extrañar que ahora esté pasando lo que está pasando en este país? ¿A quién le puede extrañar que ahora esté pasando lo que está pasando en Extremadura? ¿A quién le puede extrañar que una Consejera de la Junta -con gobierno socialdemócrata, porque lo de socialista causa estupor- pretendiera viajar en un coche de más de 80.000 €? ¿A quién le puede extrañar, por ejemplo, lo de Plasenzuela, Plasencia, la FEVAL de Don Benito (con jacuzzis a la maría), la orquesta de Extremadura (¡música maestro!), el festival de Mérida (tragedia española en lugar de griega…, para los ciudadanos, claro), lo de esos “paraísos” de la canonjía que se llaman “mancomunidades de municipios”, lo de esos Sindicatos forrándose con los cursos de formación (¿sin darlos?) que D. Felipe González “les regaló” en un principio para callarles la boca y ahora siguen y siguen con los resultados que todos conocemos (cerca de 300 imputados por corrupción van ya en Andalucía y un fraude que terminará probablemente superando los 2.000 millones de euros) o, para terminar, lo de Castuera, donde se han interpuesto denuncias por Prevaricación, Infracciones Urbanísticas (con una posible, salvo error, venta ilegal de terrenos de Equipamiento Público, ¿al estilo de Marbella?), Contrataciones en Fraude de Ley, Malversación de Caudales Públicos, Fraude y Exacciones Fiscales; y donde se ha  solicitado a la Justicia que investigue otro montón de “historias” que pudieran ser también delitos.

12/11/14