COMO SE FINANCIAN UNOS Y "LOS OTROS"

COMO SE FINANCIAN UNOS Y “LOS OTROS”

 

Molesta ya bastante, da mucho coraje, que sea raro el día que no salen a la palestra Venezuela o Irán para criticar la financiación de Podemos y algún que otro grupo de los llamados radicales por los partidos corrompidos, totalmente enfangados de la mayor putrefacción que se ha conocido en medio mundo y, por supuesto, en toda Europa (los que llevan más de 30 años “escamoteándonos” ¡miles y miles de millones de euros, BILLONES de pesetas!, a todos los españolitos de a pie)..., curiosamente, cuando los auténticos reyes de la radicalidad son los que se  financian con malas artes a costa de los demás (sólo el despilfarro aflora cada año unos 50.000 millones de euros, comisiones incluidas, eso sí). ¿Infame? No, peor, rastrero. Incluso los contertulios y algunos medios de comunicación aprovechan para resaltar la mala situación que vive la población venezolana (falta de productos básicos, cartillas de racionamiento, colas para muchas cosas, etc., etc.) y la falta de libertad en Irán. Ciertamente, lo del Chavismo y mucho más lo del Sr. Maduro (de Irán igual tenemos que hablar pronto no tan mal como lo hacemos ahora) no está nada claro, pero algunos no deberían olvidar a un tal Presidente venezolano llamado Pérez, quiero recordar, y a su amigo D. Felipe González de quien se dice que posee un barrio en Caracas. Es decir, a Venezuela ha viajado más de un político…, desde siempre. Sin dejar de poner en la cuenta de los viajes los realizados a México, donde el Sr. González se mueve como pez en el agua junto a su íntimo amigo el Sr. Slím, que es uno de los hombres más ricos del mundo. Y, cómo no, los realizados por el Sr. Aznar, incluido el de  las Azores. 

Sin, por supuesto, estar de acuerdo en absoluto de esa forma de financiarse -si es cierta, que lo dudo porque tengo derecho a cuestionarlo- mediante fondos de Dictaduras a las que habrá que devolver de alguna manera lo prestado, sí conviene que se sepa que tampoco es muy digna esa manera de financiarse de algunos a través de unas entidades bancarias a las que hemos tenido que prestar ¡60.000 millones de euros! entre todos y que luego CONDONAN los préstamos a cuenta de “legislación” favorable para poder seguir estafando a todos los ciudadanos que se le ponen por delante, amén de permitírseles un fraude, junto a las Grandes Empresas, de otros ¡90.000 millones de euros anuales!

Y aunque las comparaciones son odiosas y en este caso quizás un poco “desproporcionadas”, que no olviden nadie que aquí en España (el décimo país creo más desarrollado de la OCDE) hay nueve millones de los catorce (funcionarios aparte) que tienen trabajo, pero que aun así son pobres. ¿Hay algo más humillante que trabajar y aun así carecer de la dignidad que tu sacrificio se merece? Además de que abundan por todo el país los comedores sociales, los bancos de alimentos, etc., y la pobreza infantil ronda el 30%, junto a casi cinco millones de trabajadores en paro y el 50% de los jóvenes sin poder dejar la casa de sus padres o abuelos y con menos futuro que un espía portugués (y que me perdonen los portugueses); y, no conformes, somos los reyes de Europa en desahucios a cuenta de esos bancos a los que hemos tenido que rescatar entre todos, incongruentemente, entre los desahuciados también. Sin por supuesto dejar a un lado que el 1% de los españoles acumula tanta riqueza que hace al país líder de las desigualdades sociales. Mientras los trabajadores y los Pensionista (excepto los llegados de la política o la gran empresa) pierden poder adquisitivo hasta convertir sus salarios y sus pensiones en una vergüenza, los grandes empresarios, la banca y los millonarios se ponen las botas sin contribuir a la Hacienda Pública porque nadie se lo exige. Por tanto, un poco, un poquito de menos crítica intencionada. Primero deberíamos “barrer” nuestra casa y luego desprestigiar.

Los de Podemos -y otros- vienen como un rio desbordado y lo mejor es abrir la presa porque sino el agua saltará por encima y será mucho peor, contra la corriente es muy difícil luchar…, y mucho menos de manera irracional y tramposa como llevan haciendo desde que se instauró el régimen actual “los otros”.

29/01/16