¡QUÉ MARAVILLA DE PAÍS!
Con
esos contratos que se avecinan de 450 €/mes para los jóvenes, los famosos
mini-empleos (los minijobs de más de siete millones de alemanes), algo así como
la reedición de los contratos basura que instauró D. Felipe González para
“aligerar” el desempleo de entonces y que aún perduran aunque su previsión se
hizo para sólo unos años (lo que significó entonces, se diga lo que se diga,
que el más afamado de los Presidentes “socialistas” le metió un gol por la
escuadra a los sindicatos y a los trabajadores), pienso que, si de nuevo se
implanta otro modelo de contratos basura -se llame como se llame- estaremos
otra vez ante un contrato de explotación descarada (camuflado como juvenil,
pero que luego se expandirá a todos) que además traerá consigo un aumento del fraude
laboral y fiscal como ocurre en Alemania; país este, donde parece ser, los
empresarios (que son como los de todo el mundo, salvo excepciones que confirman
la regla) utilizan estos contratos, que en realidad son de 40 horas semanales
que se pagan la mitad en negro, para ahorrarse costos, ya que, abonan un 2% al
fisco y un 13% a la Seguridad Social de una media salarial muy baja (ronda los 230 €), que, obviamente,
obliga a los trabajadores a precisar de las ayudas sociales (las conocidas
entre los teutones como Hartz IV). Y, por supuesto, no sirven al empleado para
tener derecho al servicio de salud ni a un plan público de pensiones. En
definitiva: está muy claro que este tipo de contrato precario será una ayuda
indirecta a la empresa que ahorrará gastos sociales y pagará por debajo del
umbral de la pobreza; y, como carecemos de un sistema de subsidios sociales
comparable al alemán para compensar su inserción, supondrá, además de la
práctica eliminación del mísero Salario Mínimo Interprofesional, un aumento
considerable del número de pobres y, obviamente, del de ricos. Y, por ende,
ensanchará la franja de las desigualdades.
Con
los ricos (un millón doscientos mil, que atesoran más de un BILLÓN de €) sin
contribuir al Erario a base de utilizar SICAVs, SIF Luxemburgueses, Sociedades
Patrimoniales, Fundaciones, etc. y sin que a los que administran les parezcan
mal estas “formulas” y no estén por la labor de “retocarlas”.
Con
las Grandes Corporaciones y la Gran Empresa utilizando eso que llaman
“ingeniería contable” para realmente contribuir sólo con el 9,9% a la Hacienda
Pública en lugar del 35% que es lo que tiene establecido el Impuesto de
Sociedades que, dicho sea de paso, ahora -con el nuevo Gobierno- va a bajar y
ello supondrá en buena lógica que no contribuirán con casi nada próximamente… Y
con el hecho de que la evasión fiscal que acumulan entre las Grandes
Corporaciones, la Gran Empresa y las Grandes Fortunas supone el 91,4% del total
(unos 80.000 millones de €) y que el fraude fiscal se sitúa en el 23% del PIB
(la media europea es del 13%), lo que significa, según los Técnicos de
Hacienda, que se pierden por este concepto 241.000 millones de €.
Con
una Banca -entre las más usureras del mundo- que compra el dinero al BCE al 1%
y en lugar de utilizarlo para dar créditos a PYMES, autónomos y familias lo
dedica a sanear sus balances y comprar Deuda Pública que es más rentable; y con
lo cual, reitero una vez más, realmente nos pagan por nuestro dinero un 1% y
después nos lo prestan al 6%, de tal modo y manera que, sin por supuesto
arriesgar nada, se llenan las faltriqueras. Con lo que, lo de estas Entidades
Financieras, es verdaderamente admirable, ya que, ¿existe algún negocio mejor
que poder saquear Estados sin que te puedan llamar atracador?, y de ahí que no
nos expliquemos porqué el Estado no crea un Banco Público o nacionaliza algunos
y algunas Cajas de Ahorro para así prestar dinero directamente a PYMES,
Autónomos y Familias que son quienes pueden hacernos salir de la crisis
mediante la creación de empleo y el consumo…, de esa crisis, está más que
claro, inventada por el Sistema Financiero para forrarse y hacerse con el monto
de la Sanidad y la Educación Públicas y las Pensiones encareciendo su costo y
haciéndolo inasumibles para el Estado. Y mucho más si el Estado es una
Partidocracia donde mandan tantos referenciados de Machado que cualquier cosa,
por muy increíble que parezca, pueda suceder.
Con
tantas indecencias consentidas y abusos permitidos (a la Banca, las Grandes
Empresas y Corporaciones principalmente) que ponen de manifiesto “que muy pocos
tengan demasiado y demasiados tengan demasiado poco”; con la rampante
corrupción política en todas las Administraciones y el derroche publicitario y
propagandístico amén de con un enorme gasto en un sinfín de obras faraónicas
innecesarias…, que, probablemente, es otra manera de ocultar la manifiesta
corrupción política inmobiliaria.
Con
los aumentos de precios y tasas -y su número-, las subidas de impuestos y el
aumento de la regresividad fiscal (los que más tienen pagan menos porque tienen
más posibilidades de hacer uso de las deducciones, reducciones y bonificaciones
que el IRPF contempla y así las rentas del trabajo suponen el 75,5% del
impuesto mientras las del capital solo el 15% y las empresariales el 7,2% ), el
recorte salarial y la debilitación sindical a la vista (nuestros sueldos están
entre los más bajos de la UE y la desigualdad de renta entre el 20% que más
gana y el 20% que menos está en el nivel más alto desde 1995 -12 veces-teniendo
sólo a Letonia, Lituania y Rumanía por detrás en toda la UE-27), los recortes
sociales previstos con el nuevo Gobierno (Sanidad, Educación y Pensiones están
perseguidas por la burguesía financiera, por los “mercados”).
Así
pues, este país, nuestro país, España (con los políticos que trompan -muchos,
muchos-incluidos), pronto será, si con sorpresa al canto no lo remedia el Sr.
Rajoy, el próximo rescatado “con su propio dinero”… Y el paraíso para
futbolistas (bueno, para estos lo es ya), artistas (de la farándula
mayormente), señoritos latifundistas (como los familiares y herederos de la
Sra. Duquesa de Alba), ciertos profesionales liberales, Directivos y Ejecutivos
de los “mercados” (de la Banca en su mayor parte, entendámonos) y, cómo no,
para todos los tipos de mafias conocidas. Y claro, será también un país sin
clase trabajadora no esclavizada. Un país no neoliberal propiamente dicho, sino
un país neofascista o neonazi. El Estado del Bienestar de unos cuantos
privilegiados y políticos pero, eso sí, sometidos por el Fondo Monetario
Internacional, el Banco Central Europeo, Bruselas y algún Perico de Qatar.
En
resumen: un país, el único del mundo, que habiendo tenido durante su mayor
parte de democracia -de “democracia”- gobiernos socialdemócratas ha empeorado
en servicios y prestaciones sociales, pensiones públicas, poder adquisitivo y
salarios, educación, sanidad, justicia y, por supuesto, en estado del bienestar
entre otros menesteres; e, increíblemente, ha ganado en corrupción,
indecencias, estafa, opresión, desvergüenza, desempleo, mala educación y falta
de respeto, etc., etc., etc., etc., y todos los etc. que Vds. quieran añadir. ¡Una maravilla de país! 27-12-11
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